El rebrote del coronavirus aparecido la segunda semana de junio en China en un mercado mayorista de alimentación de Pekín ya se encuentra en su etapa final, gracias a las medidas implementadas, entre ellas un plan de pruebas masivas, señalaron autoridades sanitarias chinas.
El último parte oficial de la Comisión Nacional de Sanidad señaló que de los 22 casos de Covid-19 registrados ayer en China, 13 se produjeron por transmisión local y corresponden al rebrote de Pekín, por el que ya hay más de 200 infectados.
Hasta el lunes, 2,34 de los 20 millones de residentes de la capital china se han sometido a un plan masivo de test, lo que supone más de un 10% de la población de la ciudad, donde ya se han establecido 480 puntos donde recoger las muestras.
El subdirector del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de China, Feng Zijian, indicó hoy que si se analizan «la curva de incidencia, la composición y la procedencia de los casos», se puede colegir que los contagios entre las personas expuestas al mercado de Xinfadi están llegando a su «etapa final».
Feng, citado por el portal privado de noticias Caixin, matizó que todavía se seguirán registrando algunos casos debidos a que contagiados con exposición directa al mercado han llevado el virus a sus comunidades, sin bien precisó que en estos casos «el nivel de transmisión es muy bajo».
«Se pudo controlar el brote debido a que se detectó muy pronto y a que las medidas de control tuvieron un resultado positivo, por lo que su propagación comunitaria fue controlada de manera efectiva», destacó.
Más de 100.000 trabajadores de servicios de reparto a domicilio en la capital china se sometieron estos días a pruebas del coronavirus, ante los temores de que, debido a que su trabajo les lleva de un punto a otro de la ciudad y están en contacto con multitud de personas a lo largo de una sola jornada, puedan convertirse en vectores de expansión del virus.