Use focos LED: Los focos LED son más eficientes que los focos tradicionales, ya que consumen menos energía y tienen una vida útil más larga. Aunque los focos LED son más caros, a largo plazo resultan más económicos debido a su bajo consumo y larga duración.
Desconecte los electrodomésticos cuando no los esté usando: Muchos electrodomésticos siguen consumiendo energía aunque no están en uso. Por lo tanto, es importante desconectarlos cuando no los esté usando, especialmente si va a salir de casa por un período de tiempo prolongado.
Use la lavadora y la secadora con carga completa: La lavadora y la secadora consumen mucha energía, por lo que es importante utilizarlas con carga completa para optimizar su consumo. Además, si tiene la opción, es recomendable utilizar programas de lavado y secado en frío para ahorrar energía.
Apague las luces cuando no las necesite: Especialmente si está saliendo de una habitación por un período prolongado. Además, puede considerar la posibilidad de instalar sensores de movimiento en las áreas de mayor tráfico para que las luces se enciendan automáticamente cuando alguien entre en la habitación.
Siguiendo estos consejos, puede reducir significativamente su consumo de energía eléctrica y, por lo tanto, ahorrar en su factura de electricidad.
