Fue este viernes cuando la policía allanó dos viviendas del barrio INTA de Trelew que –según las autoridades—funcionaban como talleres clandestinos en los que se desarmaban o ensamblaban motos posiblemente robadas.
En los procedimientos –que estuvieron a cargo de personal de la subcomisaría de INTA a cargo del comisario Ibarra—se incautó también el motor de una motocicleta Motomel que “tenía pedido de secuestro activo” por un robo ocurrido en 2018, según se conoció.
La autorización para los allanamientos la dio el juez Penal de turno, pero los procedimientos se originaron –de acuerdo a lo que explicaron las autoridades intervinientes—en denuncias que vecinos del lugar habrían realizado por infracciones a ordenanzas municipales que obligan a que esos lugares deban contar con una habilitación comercial que no tenían.
Para la policía con los operativos de la víspera se logró desbaratar “pequeños talleres ilegales” que servían para desarmar o ensamblar motocicletas quizás mal habidas.