La preocupante sucesión de hechos se dio en Trelew entre el martes y el miércoles. El del coche sustraído, por ejemplo, ocurrió al este del radio céntrico y al vehiculo se lo llevaron con cuatro reposeras en el baúl. Los otros casos sucedieron al sur, en un barrio del oeste y en la zona semicéntrica y una de las víctimas, fue un empleado policial que corrió a los ladrones y logró detener a uno de ellos.
El automóvil sustraído es un Volkswagen Gol, de color blanco, dominio colocado FNJ-683 al que robaron de la calle Sarmiento al 300. Ahí lo había dejado estacionado su propietaria que viviría en otro sector de la ciudad y que denunció que al auto se lo llevaron con su licencia de conducir y toda la documentación. Además de las cuatro reposeras y la rueda de auxilio que tenía en el baúl.
Según la denunciante, tenía medio tanque de combustible, un portaequipaje hecho de manera artesanal, de madera, y unos calcos debajo de los faroles con la marca “Nike”.
En cuanto al hecho que perjudicó al policía, sucedió en el tiempo en el que estuvo haciendo compras en un autoservicio. A su vehículo le rompieron un vidrio y lo abrieron para apoderarse de todas las pertenencias que tenía en la cabina. Hasta la cubierta de auxilio, el crique y la llave cruz le robaron los tres delincuentes que se lo desvalijaron.
Él, según denunció, se enteró por una mujer que ingresó al negocio avisando que afuera habían robado en un auto; aportando las descripciones de los autores del hecho con las que luego salió a buscarlos.
Al policía, además de unas camperas y una gorra visera, le llevaron una mochila con documentación, más pertenencias y unos 8.000 pesos en efectivo.
El robo sucedió el martes a la noche, momentos antes de las 22,30. Fue en Brown y Muster en la zona sur de Trelew. Ahí, había dejado estacionado su Peugeot 208 al bajar a hacer algunas compras al mercado y ni bien se enteró –con la descripción que dio la testigo del hecho– salió a tratar de ubicar a los ladrones.
Según dicen que contó al denunciar el caso; dio algunas vueltas con el auto, los divisó alejándose en dirección noroeste y como ellos lo vieron optaron por dividirse y continuar escapando en distintos sentidos pudiendo, pese a ello, demorar a uno. El que agarró –aparentemente– llevaba puesta una de las camperas que le habían robado y la gorra visera.
El sujeto detenido ya ha estado preso varias veces por robo, sería de las Mil Viviendas y hace no mucho tiempo en ese lugar fue atacado a balazos en un hecho por el que estuvo grave internado en el hospital.
Uno de los asaltos
En medio de la sucesión de hechos de inseguridad que se dio en pocas horas en la ciudad, un joven fue a acompañar a su novia a tomar el colectivo y al regresar encontró a tres ladrones en su casa, uno le apuntó con un arma, quiso hacerlo ingresar por la fuerza pero optaron por huir llevándose un televisor del lugar cuando vieron a la pareja de la víctima que llamaba por teléfono a la policía.
El asalto sucedió también la noche del martes y lo llamativo del caso fue que uno de los maleantes –el que le apuntaba—le exigía al joven que les dijera dónde tenía droga y antes de irse le advirtieron que volverían.
El hecho ocurrió minutos antes de la medianoche en la calle Ceferino Namuncurá al 2000 en la zona oeste de Trelew y el perjudicado había dejado la puerta abierta de su domicilio al ir a acompañar a su pareja a tomar el colectivo, a una parada que estaría cerca de la vivienda.
Dicen que contó a la policía –cuando realizó la denuncia—que al final la novia no tomo el micro y que decidieron regresar a la casa encontrándose en esa circunstancia con los malvivientes que le habían invadido el domicilio. La mujer habría sido quien llamó al 101 al alejarse de él, al momento en que uno de los ladrones lo encañonaba, tratándolo de obligar a que ingresara a la vivienda.
El joven los describió como “altos, de 1.70 aproximadamente, robustos, con ropa negra, gorra visera y de edades que oscilarían entre 25 a 30 años”.
El otro asalto
El otro asalto fue en la calle y se registró este miércoles a la madrugada, alrededor de las cuatro. Fue al este del radio céntrico de la ciudad, en las proximidades del barrio La Caja, de la Escuela 724, según denunció la víctima y un amigo de él, que dijo haber sido testigo.
En el atraco al transeúnte –según denunció—lo habrían golpeado para robarle el celular y otras pertenencias. Dijo que fue cuando transitaba por la rotonda en la que confluyen la avenida Salvador Allende y la calle Lezana. Ahí lo sorprendieron dos desconocidos que le salieron al cruce y que luego de robarle habrían huido en dirección este.