Sonia Correa, miembro de la organización de esta colecta de Cáritas de Esquel, explicó que se reunirá agua mineral y lavandina para los vecinos de Cushamen y los parajes de la meseta afectados por la plaga de tucuras.
“Nuestros vecinos necesitan que los ayudemos con agua, principalmente en los parajes de Cushamen, Costa de Ñorquinco, La Rinconada, El Tropezón y Ranquilhuao”, detalló Sonia.
Llamó así a la comunidad a “acompañar a los vecinos en este momento. Están pasando una situación muy complicada”.
Explicó que el agua potable “es para el consumo personal –ya que- los bichos caen a los pozos de agua, mueren y esa agua ya no sirve para consumo humano”. En tanto, la lavandina es “para limpieza y desinfección”.
Sobre los puntos en los cuales los vecinos de la localidad cordillerana pueden acercar las donaciones, explicó que pueden hacerlo “en cualquier parroquia o en la sede del arzobispado. También nos pueden contactar a través de las redes sociales”.
Por último, informó que se recibirán las donaciones esta semana y la próxima; y que se prevé un primer envió la semana próxima en caso de tener un buen grado de acopio.