La concejal de Esquel, Valeria Saunders, se refirió a un informe solicitado al Tribunal de Cuentas provincial en el que se detalla cual es la mecánica de alquiler que se debería haber aplicado en este caso.
Vale recordar que se trata de un edificio que el Municipio de Esquel alquiló, nunca utilizó y por el que pagó 3 millones de pesos.
“Mandamos a pedir información para que nos expliciten cual es el procedimiento que se debería haber observado para esto y la respuesta la presentamos para incorporar al expediente” de la Comisión Investigadora del Concejo Deliberante.
Señaló que del informe se desprende que “por el monto y plazo se debería haber hecho licitación pública”, aclarando que “en caso de requerirse determinadas características se podría hacer una contratación directa”.
Sin embargo, para hacer esto “se tenía que hacer una consulta en el mercado inmobiliario local para ver si había otros inmuebles de las mismas características y constatar el valor”, además, estas consultas “deben constar en el expediente de contratación, lo que no sucede en este caso. No están acreditadas en la documentación que remitió el Municipio”, apuntó.
En este sentido, la edil también cuestionó que “el Intendente no puede acreditar cómo llegó el contrato a su escritorio, firmó un contrato porque dijo que a diario firma tanta documentación que no pudo acreditar de que dependencia llegó”.
Finalmente, Saunders explicó que la Comisión del Concejo se encarga de determinar la responsabilidad política de lo ocurrido, “de quien está al frente del Ejecutivo, que es el Intendente”.
En tanto, “la cuestión judicial dirime una causa penal, que podrá existir o no; y el tribunal de cuentas verá la responsabilidad administrativa”.