La mujer tenía 84 años cuando falleció el pasado 22 de junio en el hospital de Rawson a causa de “un shock séptico”, que le sobrevino tras una delicada cirugía de cadera y los hijos denunciaron penalmente al facultativo que la operó acusándolo, en principio, de “abandono de persona”. Creen que si la hubiera atendido como corresponde ellos tendrían a su madre con vida.
La presentación en la fiscalía de Trelew la hizo en las últimas horas uno de los hijos de la fallecida, que es comisario mayor retirado de la policía chubutense y la semana que viene –según se anticipó– darán detalles de lo que se denunció.
El medico acusado es prestador de PAMI y trabaja en centros asistenciales tanto de Trelew como de Rawson. Le atribuyen –entre otras cosas— un presunto mal desempeño en el caso de la abuela a la que tras someterla a una delicadísima operación le dio el alta a las pocas horas, pese a que otros facultativos observaron que nunca pudo haberla mandado a la casa tan pronto por los riesgos de vida que ello originaba, en una persona –encima—con comorbilidades de base.