La División Canes, que se encontraba cerca del lugar, observa el vehículo con las mismas características en la Avenida Juan XXIII, siguiéndolo hasta que fue interceptado en la intersección de las calles Obreros Unidos y 10 de Junio. Los ocupantes se mostraron reticentes a descender del rodado, pero finalmente accedieron.
Durante la revisión del vehículo, los agentes encontraron en el lado derecho del habitáculo un arma de fuego tipo escopeta recortada, y en el piso trasero, del lado derecho del acompañante, un cañón de color negro. Los ocupantes del vehículo, fueron detenidos y uno de ellos estaba con su hijo de cuatro años, quien fue entregado a su madre.
La fiscal de turno dispuso el secuestro del vehículo y la detención de los causantes hasta la audiencia de control de detención. Afortunadamente, no se registraron heridos ni víctimas por los disparos efectivos.