El Gobierno de Venezuela suspendió anoche su diálogo con la oposición en respuesta a la extradición a Estados Unidos de un empresario sospechado por Washington de lavado de dinero y de ser testaferro del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El presidente del Parlamento, Jorge Rodríguez, quien lidera la delegación del Gobierno en el diálogo, dijo que no viajará hoy a México para la siguiente ronda de negociaciones con la oposición.
El comunicado oficial de la Delegación del Gobierno de #Venezuela ?? para los diálogos y negociación con la oposición desarrollados en #México,anuncia la suspensión de su participación en dicho proceso como una forma de manifestación al acto de secuestro del diplomático Alex Saab pic.twitter.com/Xg9U8KptNH
— teleSUR TV (@teleSURtv) October 17, 2021
Su anuncio llegó luego de que el empresario Álex Saab fuera extraditado horas antes desde el archipiélago africano de Cabo Verde hacia a Estados Unidos, que lo requiere por sospechar que cometió lavado de dinero y actuó como testaferro de Maduro.
Saab, de 49 años, debe presentarse mañana ante una corte de Florida, informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Su abogado Manuel Pinto Monteiro dijo a la agencia de noticias AFP que su extradición fue ilegal porque el proceso en Cabo Verde no se realizó totalmente.
Saab «fue puesto en un avión del Departamento de Justicia de Estados Unidos y enviado a ese país», señaló.
El avión del Departamento de Justicia de Estados Unidos salió del aeropuerto internacional de Cabo Verde, en la isla de Sal, según la TV estatal de ese país, que indicó que había una fuerte presencia policial en la vía a la terminal.
Además de suspender el diálogo con la oposición, Venezuela calificó la extradición como un «secuestro» de su «embajador» pues Saab, que es colombiano, recibió la nacionalidad y un título de embajador mientras estaba en cautiverio en Cabo Verde.
El chavismo había intentado sumarlo a su comitiva. «No asistiremos a la ronda que debía iniciarse el día de mañana, 17 de octubre, en Ciudad de México como expresión profunda de nuestra protesta frente a la brutal agresión» contra Saab, dijo Rodríguez en Caracas.
El líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por 60 países, celebró por su parte la extradición.
«Los venezolanos, que hemos visto la justicia secuestrada por años, respaldamos y celebramos el sistema de justicia de los países democráticos como Cabo Verde, nación que reconocemos por su independencia y firmeza en medio de tantas presiones», escribió en Twitter, lamentando la decisión del Gobierno de levantarse de la mesa de diálogo.
Saab y su socio comercial Álvaro Pulido, cuyo paradero se desconoce, están acusados en Estados Unidos de dirigir una red que explotaba la ayuda alimentaria destinada a Venezuela.
Según Washington, remitieron unos 350 millones de dólares fuera de Venezuela a cuentas que controlaban en Estados Unidos y otros países y corren el riesgo de ser condenados a hasta 20 años de prisión.
Saab fue acusado en julio de 2019 en Miami por lavado de dinero y arrestado en junio de 2020 durante una escala de avión en Cabo Verde, frente a la costa de África Occidental.
El presidente colombiano, Iván Duque, dijo en Twitter que la extradición «es un triunfo en la lucha contra el narcotráfico, el lavado de activos y la corrupción que ha propiciado dictadura de Nicolás Maduro».
Extradición de Alex Saab es un triunfo en la lucha contra el narcotráfico, el lavado de activos y la corrupción que ha propiciado dictadura de Nicolás Maduro. Colombia ha apoyado y seguirá apoyando a los EE.UU. en investigación contra red de crimen trasnacional liderada por Saab.
— Iván Duque ?? (@IvanDuque) October 16, 2021
«Colombia ha apoyado y seguirá apoyando a los EEUU en investigación contra red de crimen transnacional liderada por Saab», agregó.
La máxima corte de Cabo Verde autorizó el mes pasado entregar a Saab a Estados Unidos, agotados todos los recursos judiciales.
Poco después de confirmarse la extradición, las autoridades revocaron una medida de casa por cárcel contra seis exdirectivos petroleros que cumplen condena en Venezuela por corrupción y los llevaron a una prisión desconocida.
Aunque la medida no guarda oficialmente relación, cinco de ellos tienen nacionalidad estadounidense y el otro, residencia permanente en ese país.