Una tragedia sacudió el Kumbh Mela, el mayor festival hinduista del mundo, cuando una estampida dejó al menos 15 muertos y decenas de heridos en Prayagraj. El incidente ocurrió en la madrugada del miércoles, cuando miles de peregrinos se dirigían hacia la confluencia de los ríos Ganges y Yamuna para participar en un baño ritual. El hospital Swaroop Rani Nehru confirmó la cifra de víctimas fatales y reportó que varios de los heridos se encuentran en estado grave. Las autoridades aún no han ofrecido un balance oficial.
Según testigos, el caos se desató cuando las rutas de acceso quedaron bloqueadas, lo que llevó a la multitud a empujar, provocando el aplastamiento de personas, especialmente ancianos y mujeres. El primer ministro Narendra Modi expresó sus condolencias a las familias afectadas: «Es una tragedia lamentable. Nuestros pensamientos están con los afectados», indicó su oficina.
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Este evento tenía un carácter especial en el festival, una de las jornadas más importantes para los millones de participantes. Sin embargo, debido a la tragedia, las autoridades suspendieron el acto principal del Kumbh Mela. El suceso ha desatado una ola de críticas sobre la organización del evento, especialmente por la falta de medidas de seguridad adecuadas para gestionar la enorme multitud.
Rahul Gandhi, líder de la oposición, responsabilizó al gobierno de la falta de preparación para controlar el flujo de personas, mientras que Yogi Adityanath, líder regional, reconoció las dificultades inherentes a la organización de un evento de tal magnitud.
Históricamente, el Kumbh Mela ha sido escenario de tragedias similares. En 1954, más de 400 personas perdieron la vida en una estampida, y en 2013, otras 36 personas fallecieron en un accidente en la estación de tren de Prayagraj. Este nuevo episodio pone nuevamente en evidencia los enormes desafíos de seguridad en los eventos religiosos masivos en la India.
Fuente: RFI.
Foto: © ARUN SANKAR / AFP.