«Tenemos la decisión política de integrar más componentes nacionales al sector de motos. En este sentido, impulsamos medidas concretas para que el sector continúe produciendo para el mercado local y también para fortalecer su perfil exportador y así lograr una modelo industrial cada vez más sustentable», afirmó De Mendiguren.
Con estas medidas, se apunta a que el sector genere nuevas inversiones por más de 100 millones de dólares, un ahorro de 80 millones de dólares anuales en importaciones y 800 nuevos puestos de trabajo de calidad, informó la secretaría a través de un comunicado.
Con este régimen «estamos dando previsibilidad, para que haya más inversiones con más producción nacional y más trabajo argentino», aseguró el funcionario.
De Mendiguren apuntó a que el sector «tiene un potencial enorme y aspiramos a que siga creciendo» y por eso «estamos constituyendo el Consejo Consultivo de Motos que sume a trabajadores, empresas y al Estado, para avanzar hacia una mayor integración, siguiendo el ejemplo del sector automotor que nos permitió alcanzar muy buenos resultados».
El régimen, al que adhirieron el 95% de las terminales motopartistas que trabajan en el país, mostró importantes resultados desde su sanción. El 93% de las motos comercializadas se fabrica con integración de partes locales, mientras que a principios de 2019 el porcentaje ascendía sólo al 13%.
Además, desde el inicio del régimen se contabilizaron inversiones por U$S 70 millones que crearon más trabajo argentino, y permitieron el desarrollo de 46 proveedores en todo el país.
Telam