Una tormenta de nieve sin precedentes azota Baviera, en el sur de Alemania, dejando a miles de hogares sin electricidad. Los servicios de emergencia luchan contra árboles caídos que han roto líneas eléctricas y, en algunos casos, han colapsado directamente bajo el peso de la nieve. La ciudad de Múnich se ve especialmente afectada, con la cancelación de vuelos y trenes en el Aeropuerto Internacional.
Los equipos de reparación trabajan incansablemente desde la noche del viernes, pero las condiciones meteorológicas adversas y la continua nevada complican los esfuerzos. La policía de Múnich advierte contra viajes no esenciales y la Cruz Roja Bávara realiza evacuaciones en trenes y carreteras, con un llamado urgente a quedarse en casa siempre que sea posible.
La intensidad de la nevada aumenta el riesgo de avalanchas en los Alpes bávaros, especialmente por encima de los 1.600 metros, donde el Centro de Avisos de Avalanchas advierte de un riesgo tres en una escala de cinco.
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A pesar de las difíciles condiciones, activistas propalestinos se congregan en el centro de la ciudad de Múnich para expresar su rechazo a la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza.
