El ataque aéreo alcanzó una escuela en la región de Sagaing, causando 22 muertes en plena tregua decretada por la junta tras el devastador terremoto de marzo.
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Al menos 22 personas, incluidos 20 niños, murieron este lunes 12 de mayo en Birmania como consecuencia de un bombardeo aéreo del régimen militar, a pesar de que rige una tregua humanitaria tras el sismo que azotó al país el 28 de marzo. El ataque tuvo lugar en una escuela del pueblo de Oe Htein Kwin, a unos 100 kilómetros del epicentro del terremoto, en la conflictiva región de Sagaing.
“Intentamos dispersar a los niños, pero el caza fue demasiado rápido y lanzó sus bombas”, relató una maestra presente durante el ataque, quien pidió permanecer en el anonimato por motivos de seguridad. Un funcionario local del área confirmó el número de víctimas, mientras que la junta militar aún no se ha pronunciado sobre lo ocurrido.
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su profunda alarma por la tragedia. “Las escuelas deben seguir siendo zonas en las que los niños tengan un lugar seguro para aprender y no ser bombardeadas”, declaró su portavoz desde Nueva York.
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Birmania atraviesa una guerra civil desde el golpe de Estado de 2021, cuando los militares tomaron el poder y desataron una ola de represión. La junta enfrenta una feroz resistencia por parte de grupos armados de minorías étnicas y del movimiento prodemocrático.
Aunque el régimen había decretado una tregua humanitaria hasta finales de mayo para facilitar las labores de rescate y reconstrucción luego del terremoto que dejó casi 3.800 muertos, los enfrentamientos no cesaron. El bombardeo del lunes se suma a una larga lista de ataques aéreos en zonas civiles, en una escalada que preocupa a la comunidad internacional.
Fuente y foto: DW