A 51 años del golpe de Estado en Chile, la sociedad enfrenta un recuerdo doloroso que se desvanece entre las nuevas generaciones y un interés cada vez menor.
Este 11 de septiembre se conmemoran 51 años del golpe de Estado en Chile, un evento que dividió al país y dejó una herencia de dolor y sufrimiento. Aquel día en 1973, el ejército chileno derrocó al gobierno de Salvador Allende, el primer presidente socialista elegido democráticamente en el país. Allende, enfrentando el asedio militar, se suicidó en el Palacio Presidencial antes de ser capturado.
Hoy, la memoria del golpe se enfrentaría a una creciente desconexión generacional. Las nuevas generaciones, nacidas después de la dictadura, muestran un interés decreciente por este episodio histórico, que cada vez parece más distante para ellos. Mientras tanto, la sociedad chilena sigue dividida entre quienes defienden el legado del general Augusto Pinochet y quienes lloran por los desaparecidos y los exiliados.
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La dictadura de Pinochet dejó un saldo de aproximadamente 3.200 muertos y 1.162 detenidos desaparecidos, además de miles de personas sometidas a detenciones arbitrarias, torturas y exilio. En el contexto del 51 aniversario del golpe, se realizan eventos de conmemoración y reivindicación, como el que tendrá lugar el 14 de septiembre en el monumento a Salvador Allende en Fairfield Park, Sídney.
Paula Sánchez, una de las organizadoras del evento en Sídney, subraya la importancia de transmitir el recuerdo del golpe a las nuevas generaciones, a pesar de que estas lo vivan desde una perspectiva más lejana. El profesor de sociología de la Universidad de Chile, Roberto Munita, comenta que el interés en la fecha ha disminuido, especialmente entre los jóvenes nacidos después de la dictadura. Munita señala que hoy en día, los problemas como la desigualdad, la pobreza y los modelos económicos y sociales son temas más urgentes para la sociedad chilena.
Fuente: SBS Español.