Un extracto de la piel del maní podría ser clave para inhibir el virus del dengue, según un estudio liderado por investigadores del Conicet.
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El dengue, una enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, continúa representando un desafío de gran impacto para la salud pública a nivel mundial. Sin medicamentos antivirales efectivos y accesibles disponibles hasta la fecha, la búsqueda de nuevas soluciones es crucial.
En este contexto, científicos argentinos de dos prestigiosos institutos, el Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud (Inicsa, Conicet-UNC) y el Instituto de Biotecnología Ambiental y Salud (Inbias, Conicet-UNRC), han identificado un extracto prometedor obtenido de la piel roja del maní, conocida como tegumento. Este extracto mostró un potencial significativo para inhibir el virus del dengue, cuyos resultados fueron publicados en la revista científica Plants.
El dengue cuenta con cuatro serotipos principales: DENV-1, DENV-2, DENV-3 y DENV-4. La reinfección con un serotipo diferente puede aumentar el riesgo de desarrollar formas graves, como el dengue hemorrágico. En este sentido, las investigaciones sobre el extracto de maní abren una vía para desarrollar futuros tratamientos naturales, económicos y sostenibles que podrían ser de gran utilidad en regiones vulnerables.
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Los investigadores destacaron que este avance no solo representa un enfoque innovador en la lucha contra el dengue, sino que también aprovecha un subproducto del maní, lo que podría aportar beneficios económicos y ambientales al reducir el desperdicio agrícola. Aunque los resultados son alentadores, aún se requiere más investigación para confirmar su efectividad y seguridad en aplicaciones clínicas.
Este estudio posiciona a la ciencia argentina en la vanguardia de los esfuerzos globales para enfrentar enfermedades virales emergentes como el dengue, destacando la importancia de soluciones locales y sostenibles frente a problemas de salud pública.
Fuente y foto: Diario Hoy