Padres de la Escuela de Nivel Inicial Nº 406 de Comodoro Rivadavia denunciaron que en el Hospital Regional se niegan a atender a sus hijos, los cuales presuntamente fueron abusados por un docente de la institución.
«Nos acercamos este lunes (a las 19) al Hospital a acompañar a una mamá porqué su hija, de 3 años, estaba teniendo muchos dolores en sus partes íntimas por los hechos de público conocimiento», relató a través de Radio 3 Fausto, uno de los padres del Jardín.
«Estuvimos esperando y no nos quisieron atender. Únicamente los que se ponían a disposición eran psicólogos, pero queríamos atención médica para la nena. La mamá se retiró a las 2 de este martes sin haber sido atendida. Yo fui a acompañar a la mujer porqué esto ya me pasó con mi hijo de 4 años», lamentó el hombre.
«Los médicos solo dijeron que para el problema que tenía la nena en sus partes íntimas le pongan unos productos con manzanilla e Hipoglós. A mi esto me parece una total falta de respeto. Muy poca ética profesional de la gente que tiene que brindar una atención médica de urgencia», expresó.
Fausto cuestionó que «nadie quería hacerse cargo», al tiempo que reconoció que «a esta altura del partido pienso que nadie quiere poner la firma donde se compruebe en un papel de que la nena fue abusada o violada. Esto quiere decir que si un médico lo deja escrito en un papel y le ponen un sello, automáticamente eso tiene que ir con suma urgencia hacia la Justicia y se tiene que abrir una investigación».
«Nos dijeron que por orden de la fiscal Blanco no podían atender a los nenes. Esto viola todo los derechos de los niños y la constitución nacional», manifestó.
«Yo como papá del Jardín Nº 406 y víctima del violador es que se les escapó la tortuga, y por eso mismo no abren la investigación», indicó.
Por otro lado, el hombre sostuvo que «con la investigación no se está avanzando. Lo único que están haciendo es preparar a los niños para la Cámara Gessel y es muy raro cómo se están manejando. Hasta el momento ningún nene fue sometido a Cámara Gessel».
«Creo que ya llegó el momento de dejar de callar y empezar a decir las cosas que realmente están pasando», sentenció Fausto.