«Sobre todo hay presión hacia el personal, no ha bajado el nivel de exigencia de los objetivos que tiene cada empleado en la institucional laboral, esto ha producido no sólo el agotamiento del personal bancario en general, sino que al no poder cumplir con algunos de los objetivos, sumado a la baja de rentabilidad y la crisis económica del país y el mundo, los ajuste pasan por los trabajadores: cierre de sucursales, ofrecimientos de desvinculaciones, ofertas económicas y algunas personas, debido a su situación, acceden, sin darse cuenta que la demanda laboral no es la misma de otros tiempos, hoy es difícil reinsertarse porque no están dadas las condiciones», analizó Uriarte.
«La banca extranjera, particularmente el BVVA Banco Francés y el Santander tienen los índices más altos de desocupación, y esto irá en crecimiento, no lo podemos dejar pasar y el más perjudicado será el trabajador. Si bien esta medida perjudica al cliente común, se han intensificado las operaciones online, debido a la pandemia; la banca electrónica, los cajeros automáticos, cada vez son menos las operaciones manuales o presencias», fundamentó el gremialista.
«Serán estos dos días, aunque si no no hay ningún tipo de respuestas, las medidas se irán incrementando, lo iremos evaluando», adelantó.