Rafael Grossi, líder de la OIEA, alerta sobre el incremento del riesgo nuclear en la central de Zaporizhzhia tras ataques recientes.
El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, ha emitido una advertencia preocupante sobre el riesgo inminente de un accidente nuclear en la planta de Zaporizhzhia, ubicada en el sur de Ucrania y ocupada por Rusia desde marzo de 2022. Los recientes ataques con drones contra esta central nuclear han aumentado drásticamente la amenaza, con Moscú y Kiev acusándose mutuamente por estos incidentes.
Grossi, en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, instó a que cesen de inmediato estos «ataques temerarios», que constituyen los primeros dirigidos directamente contra la mayor central eléctrica de Europa desde noviembre de 2022. Aunque no han provocado un incidente radiológico hasta ahora, han elevado considerablemente el riesgo en Zaporizhzhia, donde la seguridad nuclear ya estaba comprometida debido a dos años de conflicto armado.
MIRÁ TAMBIÉN | Hay 8,5 millones de desplazados por la guerra en Sudán
El director general del OIEA advirtió que estos ataques han sentado un peligroso precedente al alcanzar con éxito la estructura de contención de un reactor, aumentando así la posibilidad de un accidente nuclear. Grossi subrayó la urgencia de tomar medidas para evitar un desastre de esta magnitud y resaltó que cerrar los reactores no eliminaría por completo los riesgos.
Desde la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, el OIEA ha condenado en múltiples ocasiones las acciones de Rusia contra las instalaciones nucleares ucranianas. Tanto la Unión Europea como Estados Unidos se han unido a la condena, atribuyendo la inestabilidad nuclear en la zona a la toma ilegal de la central de Zaporizhzhia por parte de Rusia.
Fuente: Infobae