El papa Francisco reapareció en la plaza San Pedro del Vaticano y saludó a los fieles, en medio de su recuperación por una doble neumonía. Lo hizo en silla de ruedas y con cánulas nasales de oxígeno, a dos semanas de haber sido dado de alta del hospital Gemelli de Roma.
Al finalizar una misa dedicada a los enfermos, el sumo pontífice se dirigió brevemente al público: “Buen domingo a todos. Muchas gracias”, expresó con voz débil, acatando las recomendaciones médicas de mantener reposo absoluto.
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La aparición emocionó a los presentes, que lo esperaban con aplausos, banderas y gritos de “viva el papa”. En su ausencia, fueron cardenales y clérigos quienes encabezaron las misas, leyendo homilías y discursos preparados por él.
El arzobispo Rino Fisichella fue quien ofició la Eucaristía del Jubileo de los Enfermos, leyendo un mensaje del papa en el que compartió su experiencia con la enfermedad y la fragilidad. “Es una escuela en la que aprendemos a amar y a dejarnos amar”, escribió Francisco.
En el texto, el papa pidió no excluir a los enfermos de la sociedad y citó a Benedicto XVI, quien habló sobre la importancia de aceptar el sufrimiento. Francisco señaló que “compartir el dolor nos hace más humanos” y llamó a no marginar a los frágiles.
Más tarde, El Vaticano difundió el mensaje que el papa tenía preparado para el Ángelus. En él rezó por el personal sanitario y pidió inversiones para que los sistemas de salud sean inclusivos y atiendan especialmente a los más pobres y vulnerables.
Fuente:TN.