«Siempre hay que ser competitivos y después los momentos determinan para que está uno. El hecho de correr el campeonato desde atrás nos llevó a ser sorpresas y poder conquistar algo que es muy difícil», valoró Alfaro.
«Me integré a otro cuerpo técnico, me contaba Mario (Sciaqua) que nunca había sido campeón de nada, siempre le tocó pelear descensos, y los mismos dirigentes del club, más allá de los ascensos, nunca habían salido campeón en esta categoría. Por eso lo que se consiguió es muy valioso y ahora hay que disfrutarlo», ponderó.
Analizó que «es un juego de aciertos y errores y gana el que menos erra, en este tipo de partidos la estabilidad emocional es fundamental, y ahí lo pudimos sortear. Ellos cayeron en un pozo después de nuestro gol y a partir de ahí lo empezamos a ganar tácticamente y llegamos más enteros».
«La eficacia determina para que está uno y otro equipo y ellos no fueron eficaces como tampoco lo habíamos sido en otras finales. Y se paga con una derrota», resumió.
“Llegábamos con el 50 y 50 por ciento de las posibilidades, sentía eso porque teníamos muchos jugadores jóvenes y otros que habían llegado hacía poco. Y el partido nos dio la razón, quería que se terminara el primer tiempo, aunque Claudio (Pombo) haya empatado con un recurso que siempre tiene a mano con el tiro de media distancia, cuando llegué a vestuarios les dijo a mis compañeros que no quería perder una final jugando así”, se confesó en diálogo con la Oral Deportiva el arquero Manuel Vicentini, formado en Boca Juniors.
“En el segundo nos acomodamos, tomamos la rienda del partido y llegamos a los penales con suma confianza”, remarcó uno de los héroes del sábado.
