Elon Musk, empresario y dueño de la red social X, desató una nueva controversia al calificar al primer ministro británico, Keir Starmer, como «absolutamente despreciable». Musk lo acusó de ignorar los llamados de víctimas y sus familias en un caso de abuso sexual infantil en Inglaterra.
«Starmer ignoró repetidamente las súplicas de un gran número de niñas y de sus padres, con el fin de garantizarse apoyo político», escribió Musk en X. Las declaraciones se suman a críticas dirigidas contra la secretaria de Estado británica, Jess Phillips, a quien Musk sugirió «encarcelar» por no apoyar una investigación pública sobre abusos detectados en Oldham.
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En respuesta, Starmer afirmó que «aquellos que propagan mentiras no están interesados en las víctimas». También defendió a Phillips, destacando su trabajo en la protección de víctimas de abuso sexual. «Jess ha hecho mil veces más que lo que estos podrían soñar cuando se trata de proteger a las víctimas», declaró durante un discurso en Surrey.
El líder laborista minimizó la controversia generada en redes sociales y aseguró que «a la mayoría de la gente le importa más lo que ocurre en el NHS que lo que pasa en Twitter». La polémica subraya las tensiones entre figuras políticas y Musk, quien frecuentemente opina sobre temas políticos desde su plataforma.
Fuente: DW.