El intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre, se reunió la semana pasada con representantes de la empresa israelí Aqwise, la cual tiene una experiencia altamente comprobable en desarrollos de plantas destinadas a la desalinización de agua de mar, que fue el eje de las conversaciones.
Analizan nuevas alternativas para la potabilización del agua en Madryn
En diálogo con Radio 3, Casares indicó que «desde la empresa se hace todo lo que es el estudio y el ante proyecto y después se elabora una propuesta económica, con múltiples alternativas».
El representante reconoció que «está la posibilidad» de que se instale una planta desalinizadora, pero «solo faltan las decisiones políticas».
«UNA TECNOLOGÍA ACCESIBLE Y MANTIBLE»
Más adelante, destacó que «hace 20 años no estaba tan desarrollada esta tecnología, y digamos que la decisión de hacer acueductos en lugar de planta desalinizadora no fue errada».
«Sin embargo, hoy la desalinización del agua de mar es un hecho y es una tecnología accesible y tiene mantenibilidad. Se trata de plantas que duran casi 30 años y siempre se puede seguir repotenciando, son escalables, se pueden ir agregando módulos, asique las posibilidades son infinitas, al igual que la fuente de agua», aseveró.
Remarcó asimismo que «el sistema de distribución es el mismo, no se altera. Lo que cambia es que la fuente primaria».
La planta desalinizadora se abastecería del mar, mientras que la planta potabilizadora actual lo hace del río. «Por razones climáticas la fuente del río va mermando o se va agotando. En cambio el mar siempre va a estar disponible», comparó.
«LAS CONVESACIONES VAN A SEGUIR HASTA LLEGAR A UN ACUERDO»
«Estamos ya elaborando un ante proyecto para ver que factibilidad tiene -Madryn con esta tecnología-, su costo estimado y a partir de ahí avanzar sobre una oferta definitiva, pero con las mediciones y las evaluaciones concretas», contó.
«Obviamente que las conversaciones van a seguir y cada vez más sobre concreto, hasta en una de esas hacer un acuerdo», valoró.
«ES UN MITO QUE LAS DESALINIZADORA ALTERE EL ECOSISTEMA»
Por otro lado, Casares explicó que con el sal que se le quita al agua de mar se puede hacer varias cosas.
«Con el tema de la salmuera, que es la concentración de residuo de sal concentrada en agua que se desecha de estas plantas, hay varias alternativas. En algunas plantas se devuelve al mar sin ningún tipo de impacto ambiental», subrayó.
«En otras se aprovecha. Se las colocas en algunas piletas a cielo abierto para que evapore y la sal obtenida se puede hacer sal de mesa. E incluso las utilizan para fabricar las nuevas baterías que reemplazan a las de litios, que son las baterías de sodio. Prácticamente sería posible aprovechar esa sal para esto», dijo.
«De todas maneras, es una decisión que se toma en cada lugar y no es un problema la salmuera que se desprende de estas plantas, ya que tiene múltiples alternativas de aplicación», aseguró el representante de Aqwise.
«Es medio un mito que una planta desasilinadora genere una alteración del ecosistema. Esto no es así, no existe», sentenció Casares.