Capioví, Misiones, se convierte cada diciembre en el epicentro de la Navidad en Argentina, con una espectacular decoración que mezcla creatividad, tradición y sostenibilidad.
Cada año, durante el mes de diciembre, el pequeño pueblo de Capioví, en Misiones, se transforma en un auténtico escenario navideño. Lo que comenzó en 2009 como un modesto proyecto de catequesis familiar ha crecido significativamente, convirtiéndose en uno de los destinos más visitados de la región en la temporada navideña. Esta transformación anual ha sido posible gracias al esfuerzo colectivo y la creatividad de los habitantes, quienes cada diciembre decoran sus calles con enormes adornos, figuras gigantes, luces brillantes y elementos reciclados, generando una atmósfera mágica que atrae a miles de turistas de todo el país.
En la edición de este año, la artista local Úrsula Kleiner lideró el diseño de la ornamentación, destacando elementos que transmiten poderosos mensajes simbólicos. Las velas, que adornan diversas partes del pueblo, representan paz y espiritualidad, mientras que las mariposas monarcas, presentes en las decoraciones, son un símbolo de transformación y esperanza. El 30 de noviembre se inauguró oficialmente la decoración en la Plaza de Los Pioneros, donde el árbol navideño de 14 metros de altura se erige como la pieza central de la celebración.
MIRÁ TAMBIÉN | Alice Cooper y Slash se unen en una canción de rock para niños
Este árbol no solo es imponente por su tamaño, sino también por el mensaje que transmite. Fue construido con más de 15.000 botellas plásticas recicladas, bolsas de leche en polvo y focos LED reutilizados. De esta manera, Capioví no solo celebra la Navidad, sino que también promueve un fuerte compromiso con el cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad, valores fundamentales que han sido parte de la tradición de este pueblo durante los últimos 16 años.
Fuente: TyC.
Fotos: www.capiovi.misiones.gov.ar