El Ministerio de Salud y Ambiente de Santa Cruz informó este martes sobre dos casos confirmados de viruela símica en Río Gallegos, situación a partir de la cual se activó el «bloqueo epidemiológico» de cada paciente y su entorno, en tanto se mantiene alerta ante la posible aparición de nuevos contagiados.
«Puntualmente, en la Viruela Símica, la semana pasada hubo un primer caso sospechoso que se confirmó el pasado viernes 30 de septiembre mediante el Instituto Malbrán, que es nuestro centro nacional de referencia para analizar las muestras», explicó la secretaria de Estado de Salud y Políticas Sanitarias, Bárbara Weinzettel.
La funcionaria provincial dijo que «sobre el fin de semana, hubo otro caso sospechoso que acaba de ser confirmado, por lo cual en Santa Cruz hay dos casos confirmados».
«Las dos personas contagiadas de nuestra provincia acudieron al Hospital Regional, con la sintomatología, ante lo que se les tomó la correspondiente muestra», agregó.
Weinzettel advirtió que «el primer caso no tuvo contacto con el segundo, así que estamos atentos a la aparición de nuevos contagiados».
«Este tipo de enfermedades, que se contagian de persona a persona, viajan en avión», añadió.
La funcionaria dijo que «ante la aparición de un nuevo caso, se activa lo que llamamos el bloqueo epidemiológico que tiene que ver no sólo con el paciente, sino también con su entorno».
«Lo que hacemos puntualmente es indicarles cuáles son las medidas que deben tomar», agregó.
Weinzettel amplió que «el que se aísla es el paciente mientras que el resto toma las medidas necesarias como usar barbijo y si comparten el hogar, evitar el uso de los mismos utensilios».
«La incubación de esta enfermedad se da entre seis y trece días, y el cuidado del paciente se realiza durante tres semanas», acotó.
La autoridad sanitaria dijo que «este es un virus que se transmite de persona a persona, por contacto sexual, estrecho, físico, piel a piel, o mediante mucosas».
Para finalizar, Weinzettel señaló que «hay otras vías de contagio menos frecuentes tales como los materiales contaminados como utensilios, ropa de cama, o toallones que deben ser higienizados aparte», y aclaró que «si los convivientes no presentan síntomas, no deben hacer el aislamiento».