Este martes, en Esquel, se llevó a cabo la audiencia de control de detención y apertura de investigación por el homicidio sucedido el fin de semana en Trevelin. Por el hecho hay un solo detenido y la jueza Révori dispuso la prisión preventiva por el lapso de 30 días.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, anteriormente se realizaron ruedas de reconocimiento con respecto a los dos detenidos. En este marco, el segundo hombre fue reconocido por uno de los testigos como el presunto autor del asesinato del hombre de 67 años.
Luego de esto, este martes el único aprehendido por el hecho tuvo que ser llevado a Tribunales para la realización de la apertura de investigación. Durante este proceso judicial, los familiares de Ubelindo Santibañez, víctima del hecho, también se hicieron presentes.
El fiscal Ezequiel Forti, acompañado de la funcionaria María Elena Cimadevilla, pidió la formalización de la investigación penal y el dictado de prisión preventiva del imputado.
Además, Forti detalló cuales son los elementos que vinculas al imputado con el hecho, explicó las medidas realizadas hasta el momento y las medidas pendientes, habló de la conducta procesal del detenido y se refirió a la conmoción que produjo el suceso entre los vecinos, muchos de ellos con temor luego de haber presenciado un hecho de características tan violentas. Con estos fundamentos, y frente a la necesidad de cautelar el proceso, el fiscal solicitó el dictado de prisión preventiva por sesenta días.
Por su parte, Valeria Ponce, defensora pública, se opuso al pedido. Además, cuestionó la vinculación de su defendido con el hecho y sostuvo que el error que llevó a vincular a otra persona con lo sucedido también puede estar cometiéndose en relación a su representado y esto debe considerarse en su favor. Asimismo, indicó que podría aceptar la imposición de un arresto domiciliario en esta etapa de la investigación, fundamentalmente teniendo en cuenta la tensión que el hecho produjo en todos los afectados.
Posteriormente, la jueza Fernanda Révori le explicó en detalle a la familia de la víctima, y al imputado, cuales son las exigencias legales que debe considerar a la hora de resolver la imposición de una medida de coerción. Además, valoró los indicios que sindican al imputado como presunto autor del crimen, habló de su conducta procesal, del intento de desviar la investigación hacia una tercera persona sobre la que se realizaron varias medidas de investigación, todas ellas con resultado negativo. Asimismo, consideró la gravedad y violencia del hecho y la pena en expectativa, entre otros aspectos y concluyó en que en el caso se evidencian los peligros de fuga y de entorpecimiento procesal, por lo que es necesario el dictado de la prisión preventiva.
Tras lo expuesto por la jueza, y previendo que pueden surgir novedades en la investigación que modifiquen de algún modo la hipótesis actual de la Fiscalía, Révori dispuso que la medida sea revisada en el plazo de treinta días.
También hay que destacar que durante la audiencia hablaron la hija y el nieto del fallecido. La mujer expresó su dolor en medio de lágrimas y también dijo no entender. Además, pidió que le expliquen por qué golpearon a un «viejito».
Por su parte, el hijo de ésta, quien no pudo contener su enojo, se dirigió al imputado pidiéndole explicaciones. Ante esto, se vivió un momento tenso en la audiencia lo que llevó a la juez a indicarle que no se dirija de modo directo al imputado al hablar y tuvo que ingresar el personal de seguridad para separar visualmente, con una formación en barrara, al joven del imputado. Cuando el nieto de la víctima terminó de hablar se retiró de la sala, aun exaltado.
Fuente: Ministerio Público Fiscal Chubut.
