Foto: Olé.
La señora de 69 años estaba a decidida a cerrar una churrería, pero un pedido del 10 le cambió la vida por completo.
Los actos desinteresados de Lionel Messi continúan sorprendiendo a muchos. Esta vez, una historia conmovedora involucra a Raquel, una mujer de 69 años que estaba a punto de cerrar su churrería. Sin embargo, un inesperado pedido de Messi cambió su destino.
Sofía Snaidero, actual dueña de ‘La Churrería de Funes’, compartió la historia de Raquel, quien había trabajado durante años en el local y enfrentaba la difícil decisión de cerrar por falta de clientes. En un encuentro fortuito, Sofía se enteró de la situación y decidió ayudar económicamente a Raquel, lo que motivó a la señora a seguir trabajando. «Diez años después, Raquel sigue con nosotros», afirma Sofía.
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El giro en la vida de Raquel llegó cuando Sofía decidió enviar churros a la familia de Messi, a través de un contacto en el veterinario de sus perros. Lo que comenzó como un gesto amable se convirtió en un pedido inolvidable: «24 unidades de dulce de leche, 12 de crema pastelera y seis de Nutella». Cuando el repartidor regresó llorando, Sofía se enteró de que habían servido a la familia del astro del fútbol.
Este pedido no solo transformó la vida de Sofía, sino también la de Raquel. «Nos dio posibilidades que antes no hubiéramos imaginado», comenta emocionada. Ahora, Raquel no solo acompaña al equipo, sino que también aporta su experiencia a la churrería.
Al descubrir que el pedido era para Messi, Sofía se sorprendió y se comunicó con la familia. «No siempre tiene que ser gratis», le dijeron, lo que resalta la humildad de la familia del jugador.
Fuente: Olé.