El médico Ramiro Federico Bassi y el enfermero Patricio Walmsley son las dos víctimas fatales que tuvo el accidente aéreo registrado este martes en Esquel.
Con el correr de las horas, se conocieron aspectos de sus vidas, dedicadas al servicio humanitario, y reconocidas en la aeroevacuación, por sus colegas y por su entrega profesional.
Ramiro Bassi (44)se describía así mismo en Twitter como “padre, médico cardiólogo, aeroevacuador y buzo. Me gusta el tenis y viajar. Escucho a Bruce Springsteen y a Billy Joel”.
Él era oriundo de la localidad bonaerense de Bahía Blanca, su hijo tiene 7 años y vivía hace décadas en Bernal, provincia de Buenos Aires.
Era Cardiólogo de la Unidad Coronaria del Sanatorio Modelo de Quilmes y del Hospital Argerich, se había graduado en Evacuación Aeromédica en el Instituto Nacional de Medicina Aeronáutica y Espacial, formaba parte de la empresa MD Fly, que brinda el servicio de Ambulancias Aéreas y Escolta Médica desde 1995.
Asimismo, se indicó que en el contexto de la pandemia había ejerciendo su profesión de aeroevacuador más que nunca. El último viernes, había ido a Formosa en un vuelo sanitario para trasladar a “una paciente de 1900 gramos con una cardiopatía congénita –la cual- llegó sin complicaciones al Hospital Militar. Valió la pena trabajar un 1º de mayo”, había señalado el propio profesional en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el enfermero Patricio Walmsley, vivía en el Tigre, provincia de Buenos Aires; y era un apasionado por su tarea. Era enfermero aeroevacuador desde 2009, recibido de la Universidad de Buenos Aires; y se especializó en enfermería pediátrica.
Entre 2013 y 2018 formó parte de las organizaciones Médicos Sin Fronteras y Save The Children, y trabajó en zonas como Haití, República Centroafricana, Níger y República Democrática del Congo.
En su perfil de Linkedin, remarcaba que poseía una “amplia experiencia en traslado aéreo de mediana y alta complejidad, experiencia como enfermero laboral a cargo de grandes dotaciones”.
Trabajó 2 años como enfermero supervisor clínico de la Unidad de Salud de Emergencia de Save The Children en Reino Unido. Además, sus allegados dieron cuenta que tuvo la posibilidad de radicarse en Inglaterra, decidiendo regresar a la Argentina.
Hablaba inglés, francés y suajili, y en su Facebook personal daba cuenta de la variedad de destinos en los que trabajó. Precisamente, hace 5 años estuvo en África para colaborar con la crisis humanitaria de la República Centroafricana. En 2016 protagonizó una charla en la Ciudad Cultural Konex, donde expuso cómo fue su trabajo durante años en el Congo.
En el último tiempo, en el contexto de la pandemia, se sumó como enfermero en el SAME (Buenos Aires) y al mismo tiempo mantenía su guardia en la firma MD Fly. Precisamente, fue él quien decidió tomar el viaje a Esquel este martes entre los tres enfermeros posibles.
Los cuatro ocupantes de la nave fueron sometidos al test de Covid-19
Fuente: Télam