
Hoy en día, las ruinas de las Misiones Jesuíticas Guaraníes son un Patrimonio Mundial de la UNESCO y atraen millas de turistas cada año. Los visitantes pueden recorrer los restos de las antiguas iglesias y conventos, que todavía conservan muchos detalles originales, como las esculturas talladas en madera y las decoraciones en estuco.

Además de las ruinas, los turistas también pueden explorar las comunidades indígenas que aún residen en la región. Estos pueblos mantienen viva la cultura guaraní y ofrecen a los visitantes la oportunidad de aprender sobre sus tradiciones y costumbres. Muchos turistas también disfrutan de la deliciosa comida regional, que incluye platos como el chipá y la chipa guazú, hechos con maíz y queso.

Por último, la región de las Misiones Jesuíticas Guaraníes también cuenta con una gran belleza natural. Los turistas pueden explorar los parques nacionales de la región, como el Parque Nacional Iguazú, que alberga las famosas cataratas de Iguazú, o el Parque Nacional El Palmar, que cuenta con hermosos paisajes de palmeras y marismas. En resumen, visitar las Misiones Jesuíticas Guaraníes es una experiencia única que combina historia, cultura y naturaleza en una sola región.
