El presidente francés Emmanuel Macron encabezó este lunes, junto a la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen, la conferencia Choose Europe for Sciences en la Universidad de la Sorbona, París.
El evento marca el inicio de una campaña decidida para atraer a científicos, especialmente estadounidenses, ante lo que consideran una amenaza para la libertad académica bajo la nueva administración de Donald Trump.
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La iniciativa incluye el lanzamiento de la plataforma Choose France for Science, que promete hasta un 50% de financiación estatal para proyectos seleccionados. Macron anunció además una inversión de 100 millones de euros adicionales para captar talento científico extranjero, mientras que la Comisión Europea destinará otros 500 millones de euros para reforzar esta estrategia de seducción global.
El objetivo central es convertir a Europa en un refugio para la investigación, en un contexto donde numerosos científicos en Estados Unidos —en especial de campos como inteligencia artificial, computación cuántica y tecnologías verdes— evalúan emigrar por la creciente presión política y restricciones ideológicas. El mensaje europeo es claro: “¡Vengan a trabajar con nosotros!”
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Sin embargo, la propuesta también generó polémica. Sindicatos franceses de la educación superior calificaron la medida como “chocante e indecente”, al considerar que se prioriza atraer investigadores del extranjero antes que mejorar las condiciones locales. Además, el plan deja fuera a las humanidades y ciencias sociales, dos áreas especialmente golpeadas por los recortes en EE. UU.
Europa busca posicionarse como polo científico global, apostando a la calidad de sus infraestructuras, estabilidad social y calidad de vida. El desafío será lograrlo con presupuestos aún por debajo de los estándares norteamericanos, pero con una apuesta política clara por defender el rol de la ciencia frente a cualquier amenaza ideológica.
Fuente: RFI.