Para la fiscalía, el niño fue sustraído y ocultado de forma coordinada. Uno de los imputados es un excomisario.
Los fiscales federales solicitaron la elevación a juicio oral para las siete personas detenidas por la desaparición de Loan D.P., el niño de cinco años visto por última vez el 13 de junio de 2024 en el paraje Algarrobal, Corrientes. Seis están acusados como coautores del delito de sustracción y ocultamiento, y uno, el comisario Walter Maciel, como partícipe necesario.
El pedido fue presentado por el fiscal de Goya, Mariano De Guzmán, junto a Alejandra Mángano y Marcelo Colombo, titulares de la Procuraduría contra la Trata (PROTEX). Para los investigadores, los imputados actuaron de manera coordinada para sustraer al niño del cuidado de su padre y mantenerlo oculto hasta el día de hoy.
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Entre los acusados están la tía del menor, Laudelina Peña; su pareja, Antonio Benítez; y el matrimonio integrado por la exfuncionaria María Victoria Caillava y Carlos Pérez, cuyo vehículo fue peritado y donde se hallaron rastros odoríferos de Loan. Según la hipótesis, algunos de ellos alejaron al niño con la excusa de buscar naranjas y lo separaron del resto del grupo.
El expediente detalla que en ese trayecto los adultos apartaron a los demás niños y dejaron a Loan con quienes participaron de su desaparición. Posteriormente, el comisario Maciel, entonces jefe de la seccional local, habría entorpecido la investigación montando un falso operativo de búsqueda.
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Los fiscales aseguraron que los rastrillajes realizados en varias fechas no arrojaron resultados que indiquen que el niño se haya perdido en el monte. Tampoco se hallaron rastros ni se escucharon gritos o pedidos de ayuda. Para el MPF, todos los elementos del expediente apuntan a una maniobra delictiva deliberada.
Además del pedido de juicio, los fiscales solicitaron la extracción de testimonios y copias de evidencia digital para profundizar la investigación y dar con el paradero del niño. Señalaron que, aun si Loan hubiera sido víctima de un accidente, los acusados se habrían ocupado de esconder su cuerpo.
Para los representantes del MPF el niño “no se extravió”, y que la ausencia de resultados positivos tras los operativos nacionales e internacionales refuerza la hipótesis de una desaparición forzada. La causa seguirá abierta en busca de nuevas pruebas que permitan dar con su paradero.
