Hacía seis meses que se encontraba ahí para ser reparado. La policía dice que no tenía batería y tampoco motor; que el fuego empezó en la parte delantera de la cabina y que habría sido iniciado por alguien que después se dio a la fuga. No descartaban la hipótesis de una venganza. Las llamas casi se propagaron a otro vehículo.
El suceso se registró este jueves, alrededor de las dos de la madrugada, en el barrio “Área 23”, en la calle Los Álamos y su intersección con Los Radales. Fue un vecino del lugar que vio las llamas que comenzaban a quemar el coche y llamo enseguida a la policía.
Se trata de un Renault 19 a cuyo propietario no podían ubicarlo. El mecánico que lo tenía estacionado afuera de su taller solo sabía que era de apellido Rial y que sería un empleado estatal.