«Better Man», la esperada película biográfica de Robbie Williams dirigida por Michael Gracey (El gran showman), ha tenido un debut decepcionante en taquilla.
En su estreno en Estados Unidos, la cinta recaudó apenas 1 millón de dólares en mil 291 salas, quedando en el puesto 14 en el ranking. A nivel internacional, el panorama no mejora: en Europa, donde el cantante goza de mayor reconocimiento, alcanzó solo 1,9 millones de dólares, acumulando un total de 4,7 millones en todo el mundo.
Una apuesta arriesgada
La producción independiente, adquirida por Paramount por 25 millones de dólares y con un presupuesto estimado en 110 millones, toma un enfoque inusual al presentar a Williams como un chimpancé generado por CGI. Según el cantante, esta decisión refleja su percepción de ser «menos evolucionado que otros». Sin embargo, este recurso narrativo no ha logrado conectar con el público.
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Críticos como David A. Gross, de Franchise Entertainment Research, han calificado el presupuesto como irrealista para una película de este género. «El riesgo es excelente, pero 110 millones no es razonable para esta propuesta y este artista», señaló Gross, sugiriendo que un presupuesto de 25 a 30 millones habría sido más apropiado.
Un género en terreno incierto
Las biopics musicales han tenido resultados variados en taquilla. Mientras películas sobre Elvis Presley y Whitney Houston lograron destacarse, otras, como Back to Black (sobre Amy Winehouse), enfrentaron críticas y cifras modestas. El fracaso de Better Man destaca como un caso atípico por su elevada inversión y su peculiar propuesta narrativa.
Robbie Williams como un mono: una decisión polémica
El concepto de retratar a Robbie Williams como un chimpancé surgió del director Michael Gracey, quien buscaba un impacto emocional único. Según Gracey, “ver a un animal sufrir genera más incomodidad que ver a un humano en la misma situación”. Williams también defendió esta elección, indicando que reflejaba mejor su personalidad y sus experiencias.
“He sido un mono travieso toda mi vida”, comentó Williams, añadiendo que esta representación permite a los espectadores conectar emocionalmente sin juzgar su actuación.
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Una historia que no convenció
Pese a las intenciones artísticas, Better Man no logró atraer audiencias ni críticas favorables. Incluso fue superada por producciones de menor alcance, como The Brutalist de A24, que recaudó 1,38 millones en solo 68 salas. Aunque la película buscaba innovar dentro del género, sus riesgos narrativos y un presupuesto desproporcionado parecen haber jugado en contra de su éxito.
Fuente: Infobae.