La Administración Federal de Aviación (FAA) ordenó la suspensión de vuelos en Florida después del fallido lanzamiento del Starship de SpaceX. El incidente generó la caída de escombros en el Caribe y afectó a aeropuertos clave como Miami, Orlando y Fort Lauderdale.
La nave espacial despegó desde Starbase, Texas, pero tras separarse del cohete, perdió contacto con la empresa. SpaceX confirmó la pérdida del vehículo por segunda vez consecutiva, lo que representa un duro revés para la compañía de Elon Musk.
Videos en redes sociales muestran fragmentos de la nave iluminando el cielo en las Bahamas. La transmisión oficial de SpaceX se interrumpió sin información sobre el destino de la aeronave. La empresa reconoció que este problema ya ocurrió en un lanzamiento anterior en enero.
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Este nuevo fallo plantea dudas sobre la gestión de Musk en SpaceX, mientras se involucra en políticas gubernamentales en Washington. Su relación con la administración de Donald Trump también ha generado controversia sobre su influencia en el programa espacial estadounidense.
Las autoridades continúan evaluando los impactos del incidente y no descartan nuevas medidas de seguridad. Se espera que la FAA brinde un informe detallado sobre las posibles consecuencias para futuras misiones espaciales.
Fuente: DW.
Imagen: @_ericloosen_ via REUTERS.