Un fuerte temporal golpea el sureste de Brasil, causando al menos trece muertes y dejando una situación crítica en la zona serrana y norte del estado de Río de Janeiro.
El derrumbe de una casa y un pequeño edificio en Petrópolis, una ciudad turística ubicada a unos 70 kilómetros de la capital del estado, ha dejado cuatro fallecidos confirmados por el gobierno estatal de Río de Janeiro.
En total, siete personas perdieron la vida en el estado de Río de Janeiro debido a las intensas lluvias, con otras muertes reportadas en Teresópolis, Santa Cruz da Serra y Arraial do Cabo. Además, la Defensa Civil de Espírito Santo confirmó cuatro muertes en el sur del territorio durante la tarde del sábado.
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Este fenómeno climático es consecuencia de un frente frío que ha afectado varias regiones del país desde mediados de la semana, comenzando en Rio Grande do Sul y pasando por São Paulo antes de llegar a Río de Janeiro y Espírito Santo. Los meteorólogos del Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) advierten sobre la continuación de las precipitaciones fuertes en las sierras y norte de Río de Janeiro, manteniendo las alertas hasta el domingo en el sureste de Brasil.
Estas lluvias torrenciales llegan después de una ola de calor extremo en la región, donde se registraron temperaturas récord, con la sensación térmica alcanzando los 62,3 ºC en Río de Janeiro.
FUENTE: DW.