«No vamos a ir a una reunión donde pretendan una tregua, no damos tregua porque a nosotros no nos dieron tregua, porque estamos defendiendo los derechos de nuestro pueblo y los derechos de los trabajadores y trabajadoras», enfatizó Goodman.
«Es necesario que redoblemos los esfuerzos de todos los hombres y mujeres que le han puesto el cuerpo a nuestra lucha, que convoquemos al resto de compañeros y compañeros que nos han estado mirando pasar, que estén con nosotros los estudiantes como están hoy, los padres y las madres, como han marchado en cada ciudad», valoró.
«Hoy en Esquel no se levantaron sólo los trabajadores, sino todo el pueblo, todos los ciudadanos, en defensa del salario y de los derechos del pueblo», destacó.
«Todos los sectores que estamos acá le vamos a dar continuidad al paro hasta que cobre el último compañero», sostuvo Goodman.
«Cada uno de nosotros se lleva el compromiso de lograr ese paro nacional de todos los trabajadores y no sólo de un sector, porque es necesario que se sepa cómo nos tienen en esta provincia porque así van a estar también en las otras», advirtió.
«Ya hay 19 gobernadores que plantearon claramente esa nueva mentira de Macri luego de las elecciones. Todo lo que quita de IVA, de Ingresos Brutos, se lo quitan a los que siempre ganan, no es para nosotros», criticó.
«Y aquellos que representan a petroleros que festejan la supuesta retención de 4 pesos por dólar, cuando de cada barco que sale ganan 22 mil millones de dólares, y nosotros tenemos que contentarnos con un pedacito de regalías», cuestionó.
«No vamos a dejar a nadie afuera, porque somos generosos en la unidad, porque unidos somos invencibles, pero tenemos que ir organizados a la lucha», concluyó.
La marcha a Rawson había comenzado con una fila de vehículos que se extendió por casi dos kilómetros y a la que se acopló una multitud en el ingreso a la ciudad capital.
En el acto por el 47º aniversario de la «Masacre de Trelew», la profesora y actriz Encarnación Díaz de Mullhal, una emblemática dirigente de aquel entonces, pronunció un encendido discurso en el que aseveró que los mártires de 1972 tenían las mismas convicciones para defender la educación y los derechos de los trabajadores.