Cerca de las 22.30 de este miércoles zarpó desde el muelle Piedra Buena de Puerto Madryn el potero “Esamar 4”, perteneciente a la empresa Esamar y por primera vez en la historia pesquera está al mando de 2 mujeres.
Se trata de la capitana Nancy Jaramillo y la primera oficial Susana Benítez. Jaramillo tiene 44 años, es madre y abuela, y además, la voz de mando en una embarcación tripulada por ella, su oficial y una treintena de hombres.
El reparto de tareas entre las mujeres que comandan la nave es el natural. Benítez es la que “busca” el recurso y queda al mando del barco. Cuando se halla el cardumen, Jaramillo, comanda el operativo.
Vale señalar que desde 2013, Nancy Jaramillo es la primera y única capitana de barco pesquero de la Argentina, aunque con el título es “capitán”. Se embarcó por primera vez en 1996 en un buque de la empresa Conarpesa, luchando contra todo tipo de resistencias machistas y creencias como la idea de que una mujer a bordo era “mufa”.
Señalarla como la “culpable” de que no encontraran peces y “frenar” a trabajadores ebrios que intentaban agredirla era “habitual”. En este contexto de violencia simbólica, para la trabajadora “volverse invisible” y “pasar desapercibida” fue la forma que encontró para protegerse. Hoy, sin embargo, es la máxima autoridad del buque que conduce la faena de la pesca.
Vale señalar que actualmente en los muelles no hay inclusión con perspectiva de género y en tal sentido hay un proyecto de la senadora Nancy González que lo plantea, y ha provocado reacciones adversas de varios sectores.
Lo cierto es que por el momento el poder en el campo profesional continúa vedado para el género femenino, que descubre limitaciones invisibles a la vista de todos.
