Al menos 67 personas murieron en un ataque con dron el viernes por la noche contra un hospital en El Fasher, la capital de Darfur del Norte, Sudán.
Este es el último balance proporcionado por un comité local de resistencia, que revisó al alza una cifra inicial de 30 muertos. La fuente médica del hospital, que pidió no ser identificada, confirmó la tragedia y describió la «destrucción total» de la parte del edificio destinada a la atención de urgencias.
El ataque fue llevado a cabo por las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), un grupo paramilitar que controla gran parte de Darfur. Este ataque se suma a una serie de ataques a instalaciones civiles, siendo este hospital uno de los últimos en seguir operando en una región devastada por el conflicto.
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Sudán está inmerso en una guerra desde abril de 2023, enfrentando al ejército, dirigido por el general Abdel Fatah al Burhan, y a las FAR, comandadas por Mohamed Hamdan Daglo. El conflicto ha dejado un saldo trágico de decenas de miles de muertos y ha desplazado a más de 11 millones de personas, según la ONU.
El ataque al hospital es solo uno más en una serie de bombardeos y enfrentamientos que han marcado la violencia en Darfur, región que ya vivió hace más de 20 años el devastador conflicto generado por los Janjaweed, ahora aliados de las FAR.
Con la situación empeorando cada día, organizaciones humanitarias temen que esta nueva fase del conflicto derive en un brote de violencia étnica aún más grave, particularmente en Darfur, donde las tensiones siguen siendo fuertes.
Con información de RFI.
Foto: News Central.