El incendio forestal en Malibú, exacerbado por fuertes vientos, ha obligado a la evacuación de millas de personas, incluyendo a figuras como Cher y Dick Van Dyke. Aunque el fuego sigue fuera de control, se espera que las condiciones meteorológicas mejoren y den un respiro a los bomberos.
Un incendio forestal que comenzó la noche del lunes en Malibú, California, se ha expandido rápidamente, amenazando millas de viviendas y provocando la evacuación de residentes, incluidas celebridades como Cher y Dick Van Dyke. Para la mañana del miércoles, el fuego había quemado más de 16 kilómetros cuadrados (6 millas cuadradas) y estaba contenido solo en un 7%. Las autoridades del sur de California informaron que más de 1.500 bomberos luchaban contra las llamas, a menudo en terrenos difíciles y bajo la amenaza de fuertes vientos que complicaban los esfuerzos de contención.
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El incendio, que se ha visto agravado por las ráfagas de viento de Santa Ana, que alcanzaron los 64 km/h (40 mph), ha dejado en vilo a los residentes que esperan conocer el destino de sus hogares. Sin embargo, los meteorólogos indicaron que las condiciones meteorológicas mejorarían, lo que permitiría a los bomberos avanzar en la lucha contra el fuego. El alcalde de Malibú, Doug Stewart, señaló que los vientos ya habían disminuido, pero la alerta por incendios aún se mantenía en la zona.
Hasta el momento, el fuego ha amenazado a al menos 7.500 estructuras, afectando especialmente a las costosas propiedades de Malibú, una ciudad conocida por su paisaje costero y por ser hogar de varias celebridades. La Universidad de Pepperdine, situada en la zona, también fue evacuada, con unos 3.000 estudiantes refugiándose en el campus.
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El incendio ha generado un gran temor entre los residentes de la comunidad, incluidos aquellos de clase media y baja, que también forman una parte vital de la población local. La directora del Club de Niños y Niñas de Malibú, Kasey Earnest, expresó su preocupación por estos grupos, que no tienen los recursos de las familias más acomodadas para enfrentarse a la tragedia.
Las llamas avanzaron rápidamente por la conocida Pacific Coast Highway, saltando sobre esta carretera y acercándose al océano, donde las propiedades de lujo a menudo se encuentran en áreas propensas a los incendios. Durante un tiempo, el famoso muelle de Malibú estuvo en peligro, aunque finalmente fue protegido de las llamas. Además, un corte de energía afectó a unos 40.000 clientes, en su mayoría en el condado de Los Ángeles, mientras los equipos de Southern California Edison trabajaban para evitar daños mayores.
Fuente: AP
Foto: Jae C. Hong – AP
