Científicos checos confirmaron la existencia del Lago Neuron, un cuerpo de agua termal de más de 8.300 m³, oculto en una cueva a 100 metros de profundidad en la región de Vromoner.
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En un hallazgo sin precedentes, un equipo de científicos checos confirmó la existencia del lago termal subterráneo más grande del mundo en la región de Vromoner, al sur de Albania. Denominado Lago Neuron, este cuerpo de agua se encuentra en un abismo a más de 100 metros de profundidad y cuenta con 138 metros de largo, 42 de ancho y un volumen de 8.335 metros cúbicos, superando ampliamente el récord previo.
El equipo, liderado por el explorador de cuevas Marek Audy, detectó el lago en 2021, pero no fue hasta una reciente expedición, financiada por la Fundación Neuron, que se logró mapear con precisión sus dimensiones utilizando tecnología avanzada como escáneres lidar y sistemas GeoSlam.
El Lago Neuron se encuentra en un sistema de cuevas conocido como Atmos, una red subterránea con fuentes termales activas y procesos químicos únicos que transforman la roca caliza en yeso blando. Estas características convierten la zona en un laboratorio natural para el estudio de la geología y la biodiversidad extrema.
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El hallazgo es especialmente relevante porque los lagos termales subterráneos son extremadamente raros y su estudio puede proporcionar información valiosa sobre la actividad geotérmica, la hidrología y la posible presencia de vida microbiana en condiciones extremas.
Hasta ahora, el mayor lago termal subterráneo conocido estaba ubicado en Budapest, Hungría, pero el Lago Neuron lo supera ampliamente en tamaño y profundidad. También deja atrás a famosos lagos termales como el Frying Pan de Nueva Zelanda y la Laguna Azul de Islandia, aunque estos últimos se encuentran en la superficie.
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Los científicos planean nuevas expediciones para analizar la química del agua, la biodiversidad del ecosistema y su posible impacto en el equilibrio hídrico de la región. Además, este descubrimiento podría ser clave para la conservación del entorno, ya que los manantiales cercanos dependen del lago como fuente principal de agua.
Con el descubrimiento del Lago Neuron, la ciencia da un paso más en la exploración de los ecosistemas ocultos de nuestro planeta, abriendo nuevas puertas para la geología, la biología y la conservación ambiental.
Fuente y foto: Infobae