Los estafadores, presos en Jujuy, intentaban engañar a funcionarios y personal judicial mediante el método de «vishing».
Gendarmería Nacional desmanteló una red criminal dedicada a la estafa y extorsión telefónica que operaba desde una prisión en la provincia de Jujuy.
La banda, compuesta por individuos privados de su libertad, se especializaba en engañar a funcionarios, personal de la Fuerza y trabajadores judiciales de los fueros provincial y federal.
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Las investigaciones se iniciaron en abril, tras una orden judicial emitida por la Fiscalía Federal de Posadas, con la intervención del Juzgado Federal de la misma ciudad. La orden requería la identificación de los integrantes de esta banda criminal, que tenía como blanco diversas Unidades de Gendarmería y sedes judiciales.
Los estafadores realizaban llamadas telefónicas haciéndose pasar por funcionarios, utilizando nombres falsos y afirmando pertenecer a Juzgados o Fiscalías Federales inexistentes. Este método, conocido como «vishing», se basa en el uso de líneas telefónicas convencionales y técnicas de ingeniería social, utilizando datos de público conocimiento e información accesible en redes sociales para obtener información privada de sus víctimas.
El «vishing» es una modalidad de estafa que emplea llamadas telefónicas para engañar a las personas, aprovechando la información disponible públicamente y en redes sociales para crear una apariencia de legitimidad y así obtener datos sensibles.

Fuente y fotos: argentina.gob.ar