Mancuche denunció que este tipo de robos son frecuentes en la zona y que nadie parece hacer nada al respecto. «Me quejo y parece que no se queja nadie», dijo. Además, aseguró que no cuenta con la ayuda de nadie y que ya realizó denuncias en Arroyo Verde, pero le dijeron que no tienen vehículos para recorrer la zona.
El peón del campo expresó su cansancio ante la situación: «Soy el peón, no soy el dueño, pero ya me tienen cansado con estos robos». Según sus estimaciones, los ladrones tienen unos 15 kilómetros de costa para actuar libremente y que roban los animales dejando solamente las cabezas y las panzas en el lugar.
Mancuche lamentó la pérdida de los animales y expresó su preocupación por el valor económico de los mismos, ya que cada uno de los animales robados pesa al menos 400 kilos.