Tras perder a Kroos y Alaba, el club bávaro aprendió la lección y asegura el futuro de Davies y Musiala. Ahora, presiona a Kimmich.
El Bayern de Múnich ha tomado medidas para evitar repetir errores del pasado. La marcha de Toni Kroos al Real Madrid en 2014 por solo 25 millones de euros y la salida de David Alaba como agente libre en 2021 marcaron un antes y un después en su estrategia de renovaciones. Ahora, con Alphonso Davies y Jamal Musiala asegurados hasta 2030, el club bávaro endurece su postura con Joshua Kimmich.
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Davies, quien estuvo cerca del Madrid, decidió extender su vínculo con el Bayern a cambio de un salario de 15 millones de euros anuales y una prima por renovación de otros 15 millones. Musiala, considerado una de las grandes promesas del fútbol europeo, también renovó hasta 2030 y ahora tiene una cláusula de rescisión de 175 millones de euros, que bajará a 100 millones en su último año. Además, con un sueldo de 25 millones al año, se convirtió en el mejor pagado del equipo junto con Harry Kane.
El siguiente en la lista es Kimmich. La indecisión del mediocampista ha llevado al Bayern a retirarle la oferta inicial y ponerle un ultimátum. Aunque su nombre sonó para el Real Madrid, el Manchester City y el Barcelona, el club bávaro confía en retenerlo, salvo que reciba una oferta irrechazable.
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Pese a los rumores, el especialista en fichajes Fabrizio Romano aseguró que el Madrid nunca realizó una oferta concreta por Kimmich. Sin embargo, el Bayern ha dejado claro que ya no permitirá que sus figuras salgan sin resistencia.
Fuente: Diario AS.
Foto: bavarianfootballworks.