El asalto al Banco Río en Acassuso dejó un botín de 30 millones de dólares y marcó un hito en la historia delictiva argentina. Pero fue la traición de una amante lo que puso fin al plan perfecto.
El 13 de enero de 2006, cinco delincuentes ingresaron al Banco Río en Acassuso y llevaron a cabo lo que se conoció como el “Robo del Siglo”. Con una planeación meticulosa, lograron sustraer cerca de 30 millones de dólares en dinero y joyas, dejando tras de sí un mensaje que se volvió icónico: “En barrio de ricachones, sin armas ni rencores, es sólo plata y no amores”.
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La banda, integrada por Alberto de la Torre, Sebastián García Bolster, Mario Vitette Sellanes, Julián Zalloechevarría y Fernando Araujo, logró ejecutar el asalto sin disparar un solo tiro. Disfrazados y utilizando un túnel previamente construido, sometieron a 23 rehenes mientras la Policía bonaerense y el Grupo Halcón rodeaban el edificio. La fuga por las alcantarillas fue tan efectiva que los ladrones desaparecieron sin dejar rastro.
Tras el robo, los días de la banda estuvieron marcados por el lujo y el despilfarro. Sin embargo, este estilo de vida tuvo un final abrupto debido a una traición inesperada. La esposa de Alberto de la Torre, tras descubrirlo con una amante, acudió a la Policía para denunciarlo como miembro de la banda. Este acto marcó el inicio de la captura de todos los involucrados.
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Un mes después del asalto, la justicia logró detener a los cinco integrantes. Durante el juicio en 2010, se dictaron sentencias que inicialmente iban desde 9 hasta más de 21 años de prisión, aunque varias de ellas fueron reducidas posteriormente. Entre ellos, Luis Mario Vitette Sellanes, el líder más visible, fue deportado a Uruguay en 2013 tras cumplir parte de su condena.
A 19 años del hecho, el Robo del Siglo sigue siendo un símbolo de planificación y astucia, pero también una advertencia de cómo los vínculos personales pueden desmoronar hasta el plan más perfecto.
Fuente: Noticias Argentinas.
Foto: Perfil.