La investigación por el trágico accidente en la autopista Panamericana, que dejó como saldo cinco víctimas fatales, sumó este lunes un dato clave: el test de alcoholemia al único sobreviviente, Luciano Cingolani, dio positivo. El joven de 21 años tenía 0.65 gramos de alcohol por litro de sangre en el momento en que fue sometido al análisis.
Cingolani conducía el Citroën C4 gris que se estrelló en la madrugada del sábado, provocando la muerte de sus cinco amigos. Actualmente permanece internado en terapia intensiva y enfrenta una imputación por quíntuple homicidio culposo. El dato del alcohol en sangre agrava aún más su situación judicial.
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La prueba fue realizada cuatro horas después del choque, por lo que los peritos deberán establecer si en el momento exacto del accidente el nivel de alcohol era más alto. Según fuentes sanitarias, el registro obtenido refleja una “ebriedad leve”, aunque en la provincia de Buenos Aires rige la Ley de Alcohol Cero al volante, por lo que no hay margen para ninguna graduación alcohólica.
La causa está a cargo de la UFI N°4 de Pilar, bajo la dirección del fiscal Pablo Menteguiaga. En los próximos días se llevarán a cabo pericias accidentológicas y mecánicas para reconstruir con mayor precisión cómo ocurrió el siniestro. La declaración de Cingolani será tomada una vez que su estado de salud lo permita.
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Este caso conmocionó al país por la brutalidad del impacto y la corta edad de las víctimas. La tragedia encendió nuevamente el debate sobre el consumo de alcohol y la conducción, en especial entre los jóvenes.
Fuente: Infobae.
Foto: Clarín.
