A pocas horas del Obelisco, estas tres ciudades ofrecen experiencias culturales, gastronómicas y naturales para aprovechar al máximo fines de semana y feriados, incluso con solo 24, 48 o 72 horas disponibles.
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En un país como Argentina, donde las distancias entre ciudades son extensas, organizar escapadas breves se ha vuelto una tendencia necesaria. Ya sea en feriados o fines de semana largos, conocer destinos como Rosario, Córdoba o Mendoza en solo uno, dos o tres días es posible si se planifica bien cada jornada y se aprovechan al máximo sus propuestas turísticas, culturales y gastronómicas.
Rosario, ubicada a solo 300 kilómetros del Obelisco, permite vivir una experiencia intensa en pocas horas. El Monumento a la Bandera, la costanera, el barrio Pichincha, el Museo Castagnino y el atardecer en la rambla Cataluña son imperdibles para una jornada. Si se cuenta con dos días, el paseo en lancha por la Isla El Espinillo, el Mercado del Patio y una cena gourmet en el boulevard Oroño enriquecen la experiencia. Para estancias de tres días, se recomienda sumar el Acuario del Río Paraná, el Bioparque La Granja y una escapada al Museo del Pino de San Lorenzo, antes de despedirse con una cena de pescado de río.
Córdoba, la segunda ciudad más grande del país, combina historia colonial y naturaleza serrana. En 24 horas es posible recorrer la Manzana Jesuítica, el Cabildo y almorzar en el barrio Güemes. Con 48 horas, se pueden sumar el Parque Sarmiento, museos como el Emilio Caraffa, y cenar con vista a Nueva Córdoba. Si el viaje dura tres días, las escapadas a Villa Allende, La Cumbre o Mendiolaza ofrecen caminatas, arte local y merienda entre las sierras.
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Mendoza, capital del vino y puerta a la Cordillera de los Andes, propone un primer día con paseo por el Parque San Martín, ascenso al Cerro de la Gloria y cena en la animada calle Arístides. En dos días, se recomienda visitar bodegas en Luján de Cuyo o Maipú, combinando degustaciones con paisajes entre viñedos. Si la estadía alcanza las 72 horas, el turismo aventura toma protagonismo con actividades como rafting, trekking en Potrerillos o spa entre viñas, perfectas para reconectar antes de regresar.
Viajar en poco tiempo no significa perderse lo mejor. Rosario, Córdoba y Mendoza son ejemplos de cómo vivir intensamente la identidad argentina en cortas pero inolvidables escapadas.
Fuente: Noticias Argentinas
Foto: Archivo