“Lo estamos llevando con dificultad y al mismo tiempo con la tranquilidad desde el punto de vista sanitario, nosotros estamos en varias provincias, pero especialmente en Chubut, donde la situación se ve controlada y los números alientan, pero la cuestión económica no está corriendo la misma suerte”, analizó Silva en diálogo con La Traviata.
“Estamos en esta disyuntiva difícil de estar sanos, pero a la vez no poder generar nuestro sustento”, graficó.
“Desde hace bastante tiempo estamos vendiendo a través de la web, ya sea por Mercado Libre o las páginas nuestras (Tienda La Madrileña o Tienda Quonam), pero todo lo que es administración y distribución están en sus casas. Cuando vimos venir la cuarentena, preparamos los sistemas para que varios de nosotros podamos trabajar desde nuestras casas”, explicó sobre el funcionamiento actual de la estructura comercial.
“A los locales en este momento está yendo un mínimo de empleados porque a partir de este lunes estamos autorizados a vender con delivery, y así lo estamos haciendo, con mucho esmero y creatividad, todos en función de satisfacer al cliente que esté dispuesto a comprarnos”, valoró.
“Pero la estructura es grande y sostener esto es muy pesado. Por más que estamos felices de vender por la web o por delivery porque es mejor que nada, no nos alcanza”, lamentó.
“En toda la empresa somos 170 personas, con 20 locales desde Capital Federal hasta Santa Cruz, más oficinas y depósitos”, remarcó Silva.
“Estamos entre un 5 por ciento y crecimos hasta un ocho, a partir de este lunes que comenzamos con el delivery podemos subir a un 10 por ciento, pero bajamos un 90 por ciento de ventas respecto de antes de la cuarentena”, comparó respecto del desplome de los ingresos.
“A pesar de que el gobierno anuncia apoyos, como el de hacerse cargo del 50 por ciento de los sueldos, que es un gran beneficio gracias a Dios y al gobierno y lo vamos a aprovechar, no tenemos más acompañamiento de otros sectores del Estado, como la AFIP, porque son muchas fuentes de trabajo, en nuestro caso son 62 años, pero en general las pymes sostenemos a la sociedad y al país”, demandó.
“Entendemos que deben hacer foco en los sectores vulnerables, pero tampoco hay que desatender a los que somos formadores de trabajo genuino”, sostuvo la empresaria.
“Con los sueldos estamos al día porque fue lo que pusimos en primer lugar, pero es lo único; no estamos al día con la luz, la AFIP ni los proveedores, no estamos al día con más nadie, porque haber tenido las puertas cerradas 40 días nos lleva a esto”, evidenció.
“No sé hasta cuándo vamos a poder soportar esta situación, pero por ejemplo en Trelew el intendente está luchando bastante para que podamos abrir de a poco y captar ingresos, tener clientes y que la rueda vuelva a funcionar”, reconoció.
“Creo que vamos a salir de esta, no sé cómo, algunos más heridos que otros, pero los países se van reponiendo. En algún momento esta situación va a pasar, lo importante es que no perdamos el respeto y que podamos ser optimistas y creativos para aportar lo que tengamos para aportar”, exhortó.
“Comprar no estamos comprando porque no es necesario al no estar vendiendo. Como nos manejamos con mucho stock vamos a recomenzar con eso, pero quiero reconocer a los proveedores que nos siguen acompañando a buscar una salida”, valoró.
“Estamos en negociaciones en cómo ver el futuro porque tenemos todos con los mismos dramas”, señaló Silva.
En relación a los bancos, comentó que “las personas tienen la mejor intención, pero las cosas no llegan como se anuncian en la radio o en la televisión. Recién ahora se está empezando a ver que bajan un poco las tasas, aparecen las promesas de esos créditos al 24 por ciento en 12 meses, pero también hay que afrontar ese interés cuando uno está en cero. Parece bajo con la inflación que tenemos, pero no deja de ser alto. Le tengo temor a los créditos, yo esperaría tasas más bajas”.
“Es una situación muy delicada, aunque coincido con el Presidente que primero está la vida, pero no vaya a ser cosa que pasemos para el otro lado y no logremos ese equilibrio de poner una de cal y otra de arena”, sentenció en el final.