Israel comunicó a la ONU la cancelación del acuerdo de 1967 con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), una medida que sigue a la reciente aprobación en el Knéset de dos leyes que prohíben las operaciones de la UNRWA en Israel y los territorios palestinos.
El embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, confirmó esta decisión en la red social X, explicando que Israel informó oficialmente al Presidente de la Asamblea General sobre el fin de la cooperación.
Estas leyes, aprobadas el 28 de octubre, permiten a Israel cerrar las oficinas de la UNRWA en sus territorios, argumentando que unos 2.100 empleados de la agencia están afiliados al grupo Hamás. Israel ha señalado a la ONU la falta de medidas para solucionar lo que considera una infiltración de Hamás en la UNRWA, lo que ha llevado al país a cortar todo vínculo con la agencia.
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El embajador Danon indicó que Israel buscará colaborar con otras agencias humanitarias, excluyendo aquellas que «promuevan el terrorismo». Según la declaración emitida, esta legislación entrará en vigor en un plazo de tres meses, dando tiempo a la ONU para ajustar sus operaciones en la región.
La UNRWA, creada en 1950, atiende a más de cinco millones de refugiados palestinos, quienes en su mayoría son descendientes de los desplazados tras la creación del Estado de Israel. La agencia opera en lugares como Gaza, Cisjordania, Líbano, Siria y Jordania, proporcionando servicios educativos, sanitarios y sociales.
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La justificación de Israel se basa en acusaciones previas contra la UNRWA, como el despido de 12 empleados que supuestamente participaron en los ataques del 7 de octubre de 2023. A pesar de estos señalamientos, la agencia de la ONU respondió abriendo una investigación interna y separando a dichos trabajadores.
Fuente: DW.
Imagen: UNRWA/X.
