La edil del Bloque PJ Esquel, Lis Aguirre, volvió a ocupar su banca en el Concejo Deliberante luego de la polémica salida de Matías Peláez, quien renunció la semana pasada.
Aguirre formó parte de la sesión extraordinaria de este viernes, en la cual el Legislativo cordillerano repudió el intento de magnicidio contra le vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
«Agradezco la posibilidad de habernos podido juntar como cuerpo legislativo y haber sacado esta declaración en forma unánime», expresó la concejal en diálogo con la prensa.
«Esto no se hace por defender a una peronista, sino porque la democracia está en peligro y hay que defenderla entre todos», aseveró Aguirre.
Explicó asimismo que «esta declaración está hecha para darnos la posibilidad de reflexionar, de llamar a la construcción de una democracia en diálogo y en paz, y ocuparnos verdaderamente de aportar ideas para construir lo que nos está faltando».
«Tenemos que sacar entre todos a este bendito país por qué no la estamos pasando bien», remarcó.
Lamentó además que «nos pasa a todos de ir a comprar algo y que no nos alcance. De que nuestros salarios sean muchísimos más bajos que nuestros gastos. No nos alcanza. Tenemos una inflación importante».
«Creo que tenemos temas demasiados importantes para la gente como para andar sumando o echando leña al fuego o aumentar esta “grieta”«, manifestó.
Al referirse al ataque que sufrió este jueves la vicepresidenta, la edil aseveró que «no se puede tolerar el uso de la violencia como expresión democrática».
SU REINCORPORACIÓN AL CONCEJO
Consultada al respecto, Aguirre detalló que «es provisoria, pero estaré el tiempo que sea necesario».
Dijo que «la idea es terminar mi licencia (por cuestiones familiares), pero si tengo que venir a cumplir lo haré».
Detalló que su legar debería ser ocupado por Florencia Berza, pero ella también tiene un pedido de licencia, por lo cual le correspondería a Martín Escalón.
«Siempre estuve a disposición del bloque. Voy a estar cuando tenga que estar», sentenció Aguirre.