Un juez ecuatoriano autorizó en las últimas horas que el expresidente Lenín Moreno pueda seguir en libertad provisional mientras continúan las investigaciones en una denuncia penal por corrupción, por lo que podrá seguir residiendo en Paraguay y sólo debe regresar a Ecuador cada 4 meses.
El juez Mauricio Espinosa negó ayer a la noche un pedido de la Fiscalía, que había solicitado la prisión preventiva del exmandatario por haber incumplido otras medidas alternativas aplicadas el pasado 5 de marzo, entre ellas la presentación periódica ante la Corte Nacional de Justicia en Quito.
Moreno deberá presentarse cada mes en la Embajada ecuatoriana en Paraguay, como medida alternativa a lo solicitado por el Ministerio Público.
El exmandatario y su mujer viven desde 2022 en Paraguay, desde donde el antiguo mandatario ejerce un cargo honorífico para la Organización de Estados Americanos (OEA).
La Fiscalía sospecha de él dentro de una presunta red de sobornos que habría permitido a la empresa china Sinohydro quedarse con un importante proyecto para la construcción de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la más grande del país.
En total son 37 los acusados de cohecho en este caso, donde la Fiscalía estima que la empresa estatal china pagó en torno a 76 millones de dólares en sobornos.
Los hechos investigados ocurrieron cuando Moreno ejercía de vicepresidente durante el mandato presidencial de Rafael Correa (2007-2017), del cual es ahora un enconado rival político.
Sin embargo, Espinosa determinó que Moreno no tiene por qué entrar en prisión por ahora, sino que basta con que se presente todos los meses ante la Embajada ecuatoriana en Asunción y, cada 4 meses acuda a la Corte Nacional de Justicia en Quito.
Inicialmente, Moreno debía acudir cada dos semanas al tribunal ecuatoriano, pero su defensa había incluido entre sus alegatos la edad -70 años- y su discapacidad, informa el diario ecuatoriano El Universo.
El expresidente Rafael Correa, que también tiene causas pendientes en Ecuador, denunció un doble estándar de la Justicia, al recordar que en su caso se le ordenó viajar cada 15 días a Quito a pesar de que reside actualmente en Bélgica, lo que derivó en una orden de prisión preventiva.
“Esta pantomima de ‘justicia’ es lo que hemos sufrido estos años”, criticó en Twitter.
Fuente: Télam
