Kylian Mbappé consiguió otra victoria judicial contra el París Saint-Germain (PSG), ya que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de Francia ha ordenado al club el pago de 55 millones de euros que el delantero reclama por impagos de la pasada temporada.
Un portavoz del PSG informó a EFE que el club no tiene intención de cumplir con esta orden y que está dispuesto a llevar el asunto a instancias laborales si es necesario, afirmando que esta decisión no representa una victoria para Mbappé.
Esta es la segunda vez que las instancias deportivas francesas fallan a favor del jugador, pero el PSG tiene la opción de apelar ante la Comisión Superior de Apelación de la Federación Francesa de Fútbol (FFF). El portavoz del PSG indicó que el club continuará intentando encontrar una solución amistosa con el jugador, a pesar de las dificultades.
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El conflicto gira en torno a 55 millones de euros, que el PSG retuvo a Mbappé basándose en un acuerdo verbal para evitar que el jugador fuera apartado de la primera plantilla al inicio de la temporada pasada. Este acuerdo, mencionado por Mbappé en varias ocasiones, es la base que el PSG utiliza para negarse a pagar la suma, mientras que los abogados del futbolista lo consideran inválido.
El PSG sostiene que el jugador ha hecho compromisos claros que deben ser respetados, argumentando que le ha otorgado beneficios significativos durante sus siete años en el club. La situación ha derivado en un conflicto de “buena fe” que el PSG considera perjudicial tanto para Mbappé como para el fútbol francés en general.
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Mbappé renovó su contrato con el PSG en 2022 por dos años, con la opción de una temporada adicional. Sin embargo, antes de finalizar la primera temporada, el jugador manifestó que no deseaba activar la cláusula del tercer año. Esto llevó al club a presionarlo con un ultimátum: renovar o salir. Durante semanas, Mbappé fue apartado del primer equipo dirigido por Luis Enrique.
Para resolver la situación y permitir su regreso, se anunció que ambas partes habían llegado a un acuerdo para asegurar que su salida no se produjera sin que el PSG recibiera una compensación económica. Mientras el club sostiene que este acuerdo se refiere a los 55 millones, Mbappé argumenta que es un pacto caduco con cláusulas ocultas.
Fuente: EFE.